Cuando era peque
haciendo de la perfecta e incomprendida Sissi, pasándolo fatal en esa Corte Imperial tan clasista...
Así que no pude evitarlo y cuando tuve Sissi, una emperatriz accidental en las manos, tuve que leerlo.
Título: Sissi, emperatriz accidental
Autora: Allison Pataki
Año de edición: 2017
Editorial: Penguin Random House (Grijalbo)
Páginas: 560
ISBN: 8425354951, 9788425354953
Formato: Tapa blanda
Género: Novela histórica
Saga: Sí
Agosto de 1853. Tres mujeres descienden del carruaje que las ha traído desde su palacio a las orillas del lago Starnberg, en Baviera, hasta la Alta Austria. Elena, de dieciocho años, ha venido con su madre y su hermana menor, su principal apoyo. Todas ellas esperan que, en los próximos días, se formalice su compromiso con su primo, el emperador de Austria.
Y sin embargo, no es la seria y formal Elena sino Isabel, Sissi como la llaman familiarmente, esa otra prima de quince años, bellísima, independiente, de espíritu libre y que ha sido educada en el ambiente liberal de la residencia de los duques de Baviera la que hechiza a Francisco José I.
Nunca estuvo planeado que fuera emperatriz. Pero por una vez en la rígida y estricta corte austríaca el amor triunfó.
Poco os puedo contar sobre Sissi que no hayáis visto en las películas. Con apenas 15 años viajó a Austria, acompañando a su madre y a su hermana Nené, la escogida por su tía Sofía como prometida para su hijo, el emperador Francisco José.
Nené, el apodo cariñoso de Elena, no quiere casarse con su primo, lo cierto es que la pobre chica quiere entrar en un convento. Cosa que sus padres impiden, ser la futura madre del emperador (como si fuera una yegua), ese es el futuro que le espera.
Nadie imaginaba que el emperador iba a fijarse en su hermana pequeña, de apenas 15 años, divertida, vivaracha y llena de vida. Además de bellísima.
Debió ser la única vez que el títere de Francisco José le plantó cara a su madre, para anular su compromiso con Elena y pedir a Isabel en matrimonio.
Y la pobre Sissi más feliz que una perdiz, con aquel primo alto, rubio y de enormes ojos azules que se fijaba en ella...ya se imaginaba una vida llena de amor y niños por todas partes.
Obviamente su vida al lado de FJ (vamos a abreviar el nombre del muchacho que me duelen los dedos cuando escribo) podría haber sido estupenda, como demostraron unas pequeñas vacaciones que se tomaron en Hungría, pero en cuanto la bruja de la madre de FJ andaba cerca...
Sissi no era suficiente culta, guapa, educada, perfecta....según Sofía, para su precioso hijo y su estúpida corte llena de espías por todas partes.
Y por si fuera poco, la apartó de sus hijos. No puedo imaginar nada más doloroso para una madre que verse apartada de sus bebés. Hasta tenía que pedir hora para poder jugar un rato con ellos!!!
Con todo este ambiente, la depresión que cogió después de la muerte de una de sus niñas por unas fiebres, su relación con FJ se enfrió hasta el punto que sólo se veían en contadas ocasiones.
También se nos explica el amor que sentía la emperatriz por Hungría, el único sitio donde se sentía ella misma, y como gracias a ella se llegó a un acuerdo con ese pueblo- Aunque siempre había oído que la niña pequeña de Sissi era fruto de su amor por el conde húngaro Gyula Andrássy (al menos eso es lo que se hablaba en la corte) en la novela se nos deja bien claro que el último embarazo de la emperatriz es de la última noche que pasa con su marido,una especie de forma de pago para conseguir el tratado con Hungría.
Es curioso pero cuando pienso en Sissi, me viene a la mente Lady Di. Otra pobre niña a la que engañaron para que se casara...dos chiquillas que habrían sido felices si no las hubieran obligado a casarse, claro que Sissi lo hizo por amor, o eso nos quieren hacer creer...
He disfrutado tanto leyendo esta novela que ya tengo la segunda parte esperando para empezarla.
Ah!! Le he dado 4 estrellas en GoodReads